Carlos Amaya critica la partida de RR.HH. de los próximos presupuestos sanitarios de las CC.AA.
Madrid (15/11/2013) - Silvia C. Carpallo
El asesor de CSI-F declara que no va a haber ni sustituciones, ni peonadas y, sobre todo, que no va a haber nueva oferta pública para profesionales sanitarios, pese a lo que han anunciado algunas Comunidades, según reflejan los números de los próximos presupuestos sanitarios de las autonomías
La idea de base, es que estamos en un momento importante, porque la mayoría de las comunidades autónomas ya están llevando sus presupuestos para el próximo año a los parlamentos autonómicos, y por lo tanto, ya se van teniendo algunos datos de lo que cabe esperar respecto a Sanidad. Es por ello, que teniendo en cuenta que gran parte de los presupuestos, y más concretamente, los capítulos 1, 2 y 4, dependen en gran medida de la propia gestión diaria que hagan de ellos los profesionales, Amaya consideraba importante crear un debate al respecto, con los propios representantes sindicales.
Para comenzar explicaba que en el capítulo uno "es en el que la mayor parte de las autonomías han sufrido una reducción". Según el asesor del CSI-F, de estos números se desprende que "no sólo no va a haber sustituciones, sino que no va a haber oferta pública de empleo, ni si quiera prolongación de jornada en actividad complementaria de tarde, es decir, las conocidas peonadas", pese a que algunas CCAA, como es el caso de Madrid, hayan anunciado lo contrario. "No salen las cuentas", insistía Amaya.
"Por todo ello, desde CSI-F nos pusimos de acuerdo a través de la ejecutiva nacional para hablar de calidad, pero a la vez de eficiencia, porque al final todo lo que está ocurriendo se resumen en buscar alternativas para hacerlo todo con menos dinero, pero con la misma calidad", explicaba el experto.
Propuestas en contrapartida
Amaya no solo realizaba un diagnóstico, sino que también ofrecía alternativas, para que los propios profesionales sanitarios pudieran conseguir una reducción de los costes, pero desde el conocimiento y la racionalidad.
La primera de ellas es que "hay que incorporar criterios explícitos de priorización", es decir, establecer en las listas de espera prioridades según una patología u otra, por ejemplo. La siguiente gran asignatura pendiente es que "hay que mejorar la variabilidad clínica, hacer benchmarking debe ser un compromiso profesional importante", puesto que no olvida que se sigue dando la situación de que ante un mismo proceso, cada clínico tiene un comportamiento distinto.
Igualmente señalaba cuestiones claves como la mejora del "sobrediagnóstico y de la repetición de pruebas complementarias" y una mejora de la prescripción, sin olvidar que la Administración debe confiar en el criterio de los profesionales, y que ciertas medidas de ahorro, suponen que el paciente no tome la medicación adecuada, lo cual a largo plazo puede suponer que este acabe en urgencias al no estar controlado y sea más caro para el sistema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario