El consejero balear pide un acuerdo entre todas las CC.AA. y el Ministerio para establecer unas bases de retribución variable

Madrid (22-24/02/2014) - Silvia C. Carpallo

Martí Sansaloni intervenía en el Ciclo de Conferencias por la Calidad del SNS de la Fundación Ad Qualitatem y PSN para reclamar una mejora en la financiación sanitaria de su Comunidad, que está históricamente infrafinanciada, que permita entre otras cosas, incluir un suplemento de retribución variable para motivar la producción de los profesionales sanitarios de las Islas Baleares

"Hay que hacer una reflexión a nivel general con todas las comunidadesaAutónomas y el Ministerio de Sanidad para regular un sistema retributivo variable", esta era una de las afirmaciones que el consejero de Salud del Gobierno balear, Martí Sansaloni, realizaba dentro del Ciclo de Conferencias por la Calidad del Sistema, que organizan Previsión Sanitaria Nacional y la Fundación Ad Qualitatem. Más concretamente, Sansaloni explicaba que "la remuneración de los profesionales sanitarios no es justa ni estimula mejoras en la productividad", pero que la falta de presupuesto impedía dedicar partidas a tener esta capacidad de incluir suplementos de retribución variable, para corregir la situación.

Precisamente, ese era otro de los puntos en los que se centraba su conferencia, en la infrafinanciación de la Sanidad en las Baleares. Según el consejero se trata de una reivindicación ya histórica, que se ha ido agravando con los años, ya que no hay que olvidar que en la última década la población de las islas ha aumentado en un 21 por ciento, siendo un dato superior al de otras regiones españolas. Insistiendo en este hecho, Sansaloni manifestaba su queja respecto a la diferencia con el presupuesto de Extremadura, con quien comparten similitud en el número de población, o con las Islas Canarias, aportando que estas últimas percibieron por la insularidad 88 millones de euros, mientras que Baleares apenas llegó a los 26. Así, reconocía que "el colapso al que llegó España era muchísimo mayor en nuestras islas". Por todo ello "se tuvo que hacer una importante política de retención del gasto", que ha ocasionado que "en este momento nuestro sistema dependa de la colaboración de nuestros ciudadanos y de nuestros profesionales".

Pese a ello, el Gobierno balear ha impulsado diferentes medidas que buscan ahondar en una mejora de la prevención y de la Salud Pública, tales como "Comunidad escolar 2.0", en la que se intenta conocer cuál es la actividad física y la alimentación de los alumnos, o un círculo de conferencias por municipios, que versan sobre temas como el envejecimiento saludable, la salud sexual o los trastornos alimenticios.

Nuevas formas de gestión

Otras de las propuestas del consejero balear pasaban por apostar por la gestión concesional, en lo estrictamente no sanitario, y de hecho, explicaba que "vamos a contratar la radioterapia de las islas de Ibiza y Menorca transfiriéndolo a un modelo concesional, pero con control público". No era la única medida que ha implementado en la Consejería, donde destacaba la central de compras, un nuevo modelo sociosanitario en Mallorca, un programa de cuidados paliativos y el incremento de la capacidad de resolución en la Atención Primaria.

En su opinión, desde el Ministerio se ha centrado toda la atención en el gasto farmacéutico, cuando según sus cálculos, si se mejorase la prescripción, como en el caso de los médicos de Atención Primaria en Baleares, se podría conseguir un ahorro nacional de 1.900 millones de euros, "y con las mismas reglas de juego, sin cataloguiños ni decretos específicos".