La 'externalización' pendiente de la recusación a Martínez Tristán

Los 50 magistrados que forman el tribunal autonómico ha decidido por mayoría suspender la tramitación de los recursos contra la externalización hasta que el mismo tribunal resuelva la recusación presentada por el Partido Socialista de Madrid contra el presidente de la Sala Contenciosa-administrativa del TSJ de Madrid, Gerardo Martínez Tristán.

Soledad Valle | 21/11/2013 12:00

El proceso de externalización de seis hospitales de la Comunidad de Madrid tardará un poco más en resolverse en los tribunales, mientras mantiene su suspensión cautelar. En la reunión del Pleno del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, celebrada el pasado 31 de octubre, la mayoría de los 50 magistrados que lo forman dicidieron suspender la tramitación de los cuatro recursos que está viendo el tribunal, hasta que el mismo órgano resuelva la recusación presentada contra el presidente de la Sala Contenciosa del TSJ de Madrid, Gerardo Martínez Tristán.
La recusación contra Martínez Tristán ha sido presentada por el Partido Socialista de Madrid. El grupo de la oposición considera que el magistrado no está legitimado para decidir sobre los recursos presentados contra el proceso de externalización emprendido por el Gobierno de Madrid, con mayoría del Partido Popular, al ser estar casado con una consejera de Castilla-La Mancha, que también pertenece a este partido.
Según fuentes del TSJ de Madrid, el Partido Socialista de Madrid tenía hasta ayer para subsanar varias cuestiones de su demanda, que le habría pedido el mismo tribunal. En el caso de que éstas se hubieran hecho, se abriría un plazo de tres días para que las partes alegen. Concluido ese tiempo, seis magistrados del TSJ decidirán el juez que llevaría la instrucción de la demanda por recusación. Si el magistrado considera que existen indicios suficientes para juzgar el caso, entonces el proceso se juzgaría con los tiempos normales para estos casos, es decir, varios meses. Si embargo, si el juez considera que no hay fundamento en la demanda, la demanda se archivaría. Entonces, la tramitación de los procesos de externalización quedarían desbloqueados.
En ese supuesto, el TSJ de Madrid tendría que volver a convocar el pleno de los magistrados, es decir, reunir a los 50, para decidir sobre la unificación de estos procesos en una sola sala, que fue la cuestión que motivó la reunión del 31 de octubre y sobre la que no se pudo decidir por la recusación que pende sobre Martínez Tristán.
En cualquier de los supuestos, es indiscutible que con este nuevo escollo en el camino, la resolución de la externalización se demora un poco o un mucho más. "La recusación puede resolverse en días o en meses", así se pronunciaron desde el TSJ de Madrid. Y, después, la reunión del pleno, y después la resolución de los cuatro recursos... Voces cualificadas apuntan a la primavera, como pronto.