El Parlamento rechazará la ley del aborto

PSOE y PP se intercambian sin éxito ofertas de diálogo para pactar la norma

EL PAÍS Sevilla 26 DIC 2013 - 19:03 CET

Mario Jiménez, esta mañana en el Parlamento. / EUROPA PRESS

El Parlamento de Andalucía instará al Gobierno central en el primer pleno ordinario a que retire el anteproyecto de ley del aborto. La iniciativa contará con los votos del PSOE e IU. El portavoz parlamentario socialista, Mario Jiménez, justificó el rechazo a la normativa en que es “bananera” y se ha “hecho al dictado de la Conferencia Episcopal y de los grupos más radicales de la derecha”. Jiménez afirmó que buscarán el apoyo del PP, pero el secretario general de esta formación, José Luis Sanz, desconfió de la oferta y aseguró que el PSOE busca la “confrontación” en lugar del diálogo.

“Es sorprendente que el PSOE, cuando el proyecto de ley aún no ha iniciado su tramitación parlamentaria, esté haciendo ya llamamientos de salir a la calle, en vez de prestarse a dialogar y participar en el desarrollo parlamentario de la norma. Sería mucho más productivo un Partido Socialista que quisiera llegar a acuerdos y a negociar una ley con el PP, en vez de hacer llamamientos a la confrontación y el enfrentamiento”, afirmó el dirigente del PP.

Sanz admitió que en su formación no hay una opinión unánime sobre esta ley y dijo que respeta las discrepancias.

La actitud del PSOE ahora es distinta de la que se registró el pasado mes de mayo, cuando Izquierda Unida arrastró a los socialistas a votar en el Parlamento andaluz una iniciativa a favor del aborto libre, ampliando los plazos previstos en la norma que había aprobado el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2010.

Izquierda Unida pidió en esa ocasión que se ampliaran los derechos reconocidos en la ley vigente de manera y se aprobara la “la despenalización total del aborto voluntario”, eliminando las figuras que permanecen incluidas en el Código Penal. La propuesta generó un debate interno en el PSOE, que terminó por respaldar plenamente la propuesta de IU gracias a la presión de las diputadas y a pesar de quienes esgrimían que el PSOE debería respaldar la ley de plazos aprobada por su partido en Madrid.

Ante la petición de los socialistas para que se retirara la referencia a la despenalización, IU se negó, aunque aceptó modificar su propuesta sobre la implicación de la red sanitaria pública.