Boi Ruiz niega que haya casos de desnutrición infantil en Cataluña
El consejero considera que se ha llevado al extremo el informe del Síndic de Greuges
El responsable de Salud vuelve a dar los polémicos datos de las listas de espera
Antía Castedo Barcelona 23 AGO 2013 - 14:43 CET
El consejero de Salud, Boi Ruiz, ha matizado en una entrevista en TV-3 las conclusiones del informe del Síndic de Greuges, Rafael Ribó, que afirmaba que hay 750 niños que sufren desnutrición y hay hasta 50.000 niños malnutridos. Según Ruiz, en Cataluña no hay niños con desnutrición causada por el hambre y los que presentan síntomas de desnutrición lo hacen porque sufren alguna enfermedad genética o adquirida que les impide asimilar los nutrientes de forma adecuada. Ruiz sí ha admitido que hay pequeños con problemas de malnutrición, bien sea porque no ingieren suficientes proteínas de la carne y del pescado o porque se alimentan mal al ingerir algunos productos en exceso, como la comida rápida o preparada.
“Entiendo que los pediatras hayan puesto el grito en el cielo”, ha dicho Ruiz sobre la reacción de la Sociedad Catalana de Pediatría, que puso en duda las conclusiones del síndic. El consejero ha afirmado que las conclusiones del síndic se han “exagerado” y que el informe ha sido malinterpretado, pero también ha asegurado que las consultas de atención primaria y hospitales deben estar "muy pendientes" de si llegan niños con signos de desnutrición.
Sobre la prórroga de presupuestos de la Generalitat y el efecto que tiene sobre un sistemas de salud diezmado, el consejero ha constatado que los hospitales deben trabajar este año con los mismos ingresos que en 2012, lo que supone mantener los recortes ejecutados desde el 2011 hasta el año pasado.
El consejero ha replicado a las críticas por el cierre de camas en los hospitales en los meses de verano asegurando que se clausuran para organizar las vacaciones del personal: "No se cierran camas. Todo el mundo sabe que se programan las camas para poder programar las vacaciones” de los trabajadores.
En la entrevista, Ruiz ha repetido algunas afirmaciones que han causado polémica en lo que va de año. El consejero ha vuelto a decir que su departamento ha logrado reducir las listas de espera “sustancialmente”.
“La mayoría de la gente espera entre siete y ocho meses para ser operada” de algunas de las 14 intervenciones cuyo tiempo medio de espera (seis meses) está supuestamente garantizado por ley. En 2011, según Ruiz, esa cifra estaba entre los siete meses y medio y los ocho meses. Lo que hace el consejero es lo que su departamento ya intentó en marzo: fijar la atención de la opinión pública en un nuevo parámetro que se ha publicado por vez primera este año.
En lugar de publicar el tiempo medio de espera de los pacientes ya operados —que ha aumentado para las 14 intervenciones—, hizo público otro parámetro: el tiempo medio de espera de las personas pendientes de ser operadas, este mucho más favorable, ya que en diciembre había descendido para todas las operaciones una media del 15,9%.
En cambio, el tiempo medio de espera de las personas operadas aumentó un 35,7% en un solo año, entre diciembre de 2011 y diciembre de 2012. En 7 de las 14 operaciones garantizadas, Salud ha incumplido ese límite. Es el caso de las intervenciones de prótesis de rodillas y cadera, con un efecto muy importante sobre la calidad de vida de los pacientes, el tiempo medio de espera ha sido de 9,7 y 7,6 meses, respectivamente.
Sobre el cierre de centros de atención primaria y la reordenación de servicios, Ruiz ha repetido que “no se puede hacer todo en todos los sitios”. Según el consejero, las nuevas tecnologías y las carreteras catalanas permiten cerrar algunos centros y concentrar la actividad en otros.
“Entiendo que los pediatras hayan puesto el grito en el cielo”, ha dicho Ruiz sobre la reacción de la Sociedad Catalana de Pediatría, que puso en duda las conclusiones del síndic. El consejero ha afirmado que las conclusiones del síndic se han “exagerado” y que el informe ha sido malinterpretado, pero también ha asegurado que las consultas de atención primaria y hospitales deben estar "muy pendientes" de si llegan niños con signos de desnutrición.
Sobre la prórroga de presupuestos de la Generalitat y el efecto que tiene sobre un sistemas de salud diezmado, el consejero ha constatado que los hospitales deben trabajar este año con los mismos ingresos que en 2012, lo que supone mantener los recortes ejecutados desde el 2011 hasta el año pasado.
El consejero ha replicado a las críticas por el cierre de camas en los hospitales en los meses de verano asegurando que se clausuran para organizar las vacaciones del personal: "No se cierran camas. Todo el mundo sabe que se programan las camas para poder programar las vacaciones” de los trabajadores.
En la entrevista, Ruiz ha repetido algunas afirmaciones que han causado polémica en lo que va de año. El consejero ha vuelto a decir que su departamento ha logrado reducir las listas de espera “sustancialmente”.
“La mayoría de la gente espera entre siete y ocho meses para ser operada” de algunas de las 14 intervenciones cuyo tiempo medio de espera (seis meses) está supuestamente garantizado por ley. En 2011, según Ruiz, esa cifra estaba entre los siete meses y medio y los ocho meses. Lo que hace el consejero es lo que su departamento ya intentó en marzo: fijar la atención de la opinión pública en un nuevo parámetro que se ha publicado por vez primera este año.
En lugar de publicar el tiempo medio de espera de los pacientes ya operados —que ha aumentado para las 14 intervenciones—, hizo público otro parámetro: el tiempo medio de espera de las personas pendientes de ser operadas, este mucho más favorable, ya que en diciembre había descendido para todas las operaciones una media del 15,9%.
En cambio, el tiempo medio de espera de las personas operadas aumentó un 35,7% en un solo año, entre diciembre de 2011 y diciembre de 2012. En 7 de las 14 operaciones garantizadas, Salud ha incumplido ese límite. Es el caso de las intervenciones de prótesis de rodillas y cadera, con un efecto muy importante sobre la calidad de vida de los pacientes, el tiempo medio de espera ha sido de 9,7 y 7,6 meses, respectivamente.
Sobre el cierre de centros de atención primaria y la reordenación de servicios, Ruiz ha repetido que “no se puede hacer todo en todos los sitios”. Según el consejero, las nuevas tecnologías y las carreteras catalanas permiten cerrar algunos centros y concentrar la actividad en otros.
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