contratos con centros y servicios
El 40% de los indicadores de gestión irán encaminados a ganar eficiencia
Los departamentos, centros y servicios de emergencias de la Comunidad Valenciana han firmado con la consejería los contratos de gestión correspondientes a este año, donde hasta el 40 por ciento de los indicadores se dedican a evaluar medidas de mejora de la eficiencia, buscando con ello garantizar la sostenibilidad del sistema.
Enrique Mezquita. Valencia | 09/04/2012 00:00
La Consejería de Sanidad valenciana, con Luis Rosado a la cabeza, ratificó con los gerentes de los 24 departamentos de salud y los responsables de los seis hospitales de atención a pacientes crónicos y de larga estancia (La Magdalena, Padre Jofré, Doctor Moliner, La Pedrera, San Vicente del Raspeig y el Hospital Militar), los tres servicios provinciales de emergencias sanitarias provinciales y los centros de transfusión regionales, los acuerdos de gestión para 2012, un documento en el que se plasman los objetivos de actuación de los centros asistenciales de la región y que son necesarios tanto para cumplir el Plan Estratégico de la Agencia Valenciana de Salud (AVS) como para el reparto de la productividad variable.
En esta edición, los acuerdos priorizan garantizar la sostenibilidad del sistema y, en la práctica, hasta el 40 por ciento de las medidas contempladas se basan en mejoras de la eficiencia y del uso de los recursos, la contención del gasto y la excelencia en la calidad y seguridad de la atención al paciente.
De forma más concreta, Rosado destacó que "los alrededor de cien indicadores que se contemplan se pueden agrupar en tres tipos de objetivos: promoción y mantenimiento de la salud; mejora de la inmediatez y la calidad del tratamiento de las enfermedades, y mayor eficiencia para la sostenibilidad del sistema sanitario".
En total, 130 indicadores garantizan el cumplimiento de los objetivos en toda la organización sanitaria. El sistema maneja en cada evaluación de resultados más de 50.000 datos, aunque para cada profesional son unos pocos indicadores los que valoran su contribución.
Además, Rosado señaló que la partida prevista para este año gira "en torno a los 20 millones de euros", una cifra similar a la de la campaña anterior. Una buena muestra del interés de Rosado y su equipo por la sostenibilidad es que algunos de los indicadores van orientados a gestionar los costes más ajustadamente en contexto de crisis, como garantizar que la adquisición de complejos productos sanitarios se efectúe a la mejor relación calidad-precio.
Asimismo, como expresó el propio consejero, la mejor utilización de los recursos es otra gran prioridad de su departamento, con medidas destinadas a reducir los "tiempos muertos", como maximizar la ocupación de bloques quirúrgicos y con la apertura por las tardes de los centros de salud.
Diferenciación por grupos
El cumplimiento de los objetivos determina parte de la retribución variable del personal de la Agencia Valenciana de Salud -alrededor de 65.000 profesionales-, una cantidad que hasta el momento se distribuía en todas las categorías de trabajadores correspondientes a cada servicio de manera homogénea.
Para motivar la participación de los profesionales, en esta edición la ponderación se establecerá según criterios de implicación en el proceso de toma de decisiones, diferenciándose tres grupos para el reparto por separado de incentivos según su responsabilidad: directivos, médicos y enfermería y resto de personal.
En este sentido, Rosado destacó especialmente que la incentivación a los equipos directivos tendrá muy en cuenta su capacidad de gestión y de optimización de recursos. Además, los resultados globales por departamentos serán la base para la distribución de otros complementos de evaluación de desempeño y participación en la eficiencia.
En esta línea, desde Sanidad se ha insistido en la voluntad de "consolidar y aumentar" el complemento de productividad variable, de forma que más de una cuarta parte del salario de los profesionales se obtenga en función de los resultados obtenidos.
En esta edición, los acuerdos priorizan garantizar la sostenibilidad del sistema y, en la práctica, hasta el 40 por ciento de las medidas contempladas se basan en mejoras de la eficiencia y del uso de los recursos, la contención del gasto y la excelencia en la calidad y seguridad de la atención al paciente.
- La ponderación en el reparto de incentivos se establecerá según la implicación del profesional en la toma de decisiones
De forma más concreta, Rosado destacó que "los alrededor de cien indicadores que se contemplan se pueden agrupar en tres tipos de objetivos: promoción y mantenimiento de la salud; mejora de la inmediatez y la calidad del tratamiento de las enfermedades, y mayor eficiencia para la sostenibilidad del sistema sanitario".
En total, 130 indicadores garantizan el cumplimiento de los objetivos en toda la organización sanitaria. El sistema maneja en cada evaluación de resultados más de 50.000 datos, aunque para cada profesional son unos pocos indicadores los que valoran su contribución.
Además, Rosado señaló que la partida prevista para este año gira "en torno a los 20 millones de euros", una cifra similar a la de la campaña anterior. Una buena muestra del interés de Rosado y su equipo por la sostenibilidad es que algunos de los indicadores van orientados a gestionar los costes más ajustadamente en contexto de crisis, como garantizar que la adquisición de complejos productos sanitarios se efectúe a la mejor relación calidad-precio.
Asimismo, como expresó el propio consejero, la mejor utilización de los recursos es otra gran prioridad de su departamento, con medidas destinadas a reducir los "tiempos muertos", como maximizar la ocupación de bloques quirúrgicos y con la apertura por las tardes de los centros de salud.
Diferenciación por grupos
El cumplimiento de los objetivos determina parte de la retribución variable del personal de la Agencia Valenciana de Salud -alrededor de 65.000 profesionales-, una cantidad que hasta el momento se distribuía en todas las categorías de trabajadores correspondientes a cada servicio de manera homogénea.
Para motivar la participación de los profesionales, en esta edición la ponderación se establecerá según criterios de implicación en el proceso de toma de decisiones, diferenciándose tres grupos para el reparto por separado de incentivos según su responsabilidad: directivos, médicos y enfermería y resto de personal.
En este sentido, Rosado destacó especialmente que la incentivación a los equipos directivos tendrá muy en cuenta su capacidad de gestión y de optimización de recursos. Además, los resultados globales por departamentos serán la base para la distribución de otros complementos de evaluación de desempeño y participación en la eficiencia.
En esta línea, desde Sanidad se ha insistido en la voluntad de "consolidar y aumentar" el complemento de productividad variable, de forma que más de una cuarta parte del salario de los profesionales se obtenga en función de los resultados obtenidos.
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