CONVENIO | Observatorio de la Nutrición
Sanidad se compromete a que los productos cárnicos tengan menos sal y grasas
El anunciado Observatorio de la Nutrición y de Estudio de la Obesidad, que preside el cardiólogo Valentín Fuster, ha comenzado a dar sus primeros pasos de forma oficial. La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha presidido este jueves la reunión constitutiva del organismo, que tiene como objetivo mejorar la nutrición y los hábitos de vida de la población, especialmente la infantil.
La titular de la cartera de Sanidad ha aprovechado su intervención para anunciar la firma de un convenio con la industria para reducir la sal y las grasas saturadas en los productos cárnicos y de charcutería.
Según ha adelantado, en un plazo de dos años la Confederación Española de Detallistas de la Carne y Asociación de Fabricantes y Comercializadores de Aditivos y Complementos Alimentarios ha asumido el compromiso de reducir un 10% la sal y un 5% las grasas en los productos que elaboran.
Mato no es la primera ministra de Sanidad que afirma querer plantarle cara a la sal. Durante su mandato, Bernat Soria también anunció un plan para reducir las enfermedades cardiovasculares que incluía un pormenorizado estudio sobre el consumo de sal en España. Pero la iniciativa no llegó a contemplar acciones concretas al margen de las campañas de concienciación, pese a que también se anunciaron intervenciones concretas destinadas a disminuir el contenido de sal en los alimentos procesados y en la hostelería.
En la presentación del Observatorio, Mato también ha señalado que es necesario hacer un esfuerzo para que "ninguna familia se vea en una situación de especial vulnerabilidad que les lleve a descuidar los buenos hábitos alimentarios y una dieta equilibrada".
En este sentido, Mato ha explicado que, tanto el Plan de Infancia y Adolescencia y el Plan de Inclusión Social recogen medidas concretas para evitar problemas de nutrición u obesidad en familias especialmente vulnerables y erradicar la pobreza infantil.
La titular de la cartera de Sanidad ha aprovechado su intervención para anunciar la firma de un convenio con la industria para reducir la sal y las grasas saturadas en los productos cárnicos y de charcutería.
Según ha adelantado, en un plazo de dos años la Confederación Española de Detallistas de la Carne y Asociación de Fabricantes y Comercializadores de Aditivos y Complementos Alimentarios ha asumido el compromiso de reducir un 10% la sal y un 5% las grasas en los productos que elaboran.
Mato no es la primera ministra de Sanidad que afirma querer plantarle cara a la sal. Durante su mandato, Bernat Soria también anunció un plan para reducir las enfermedades cardiovasculares que incluía un pormenorizado estudio sobre el consumo de sal en España. Pero la iniciativa no llegó a contemplar acciones concretas al margen de las campañas de concienciación, pese a que también se anunciaron intervenciones concretas destinadas a disminuir el contenido de sal en los alimentos procesados y en la hostelería.
En la presentación del Observatorio, Mato también ha señalado que es necesario hacer un esfuerzo para que "ninguna familia se vea en una situación de especial vulnerabilidad que les lleve a descuidar los buenos hábitos alimentarios y una dieta equilibrada".
En este sentido, Mato ha explicado que, tanto el Plan de Infancia y Adolescencia y el Plan de Inclusión Social recogen medidas concretas para evitar problemas de nutrición u obesidad en familias especialmente vulnerables y erradicar la pobreza infantil.
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