MUJER | Anticonceptivos
Sanidad deja de financiar ocho píldoras anticonceptivas
![[foto de la noticia]](https://lh3.googleusercontent.com/blogger_img_proxy/AEn0k_sveMJXt27dd4BPdJjVLgulG50mDdwjMuIrtxHOBK4jIVbirpw6aZQvBDRNa18uFlF7I62BItlsTAKz1EKU6UmJMH6SOpNMl6k0aSebN2Z30RWobNyANVINvW76FGrl0WaGgpUxDt6y3-kN0Ozd-Cuo5E4vyYbL9QxhS9kVY4I2wdbf=s0-d "[foto de la noticia]")
- Se trata de compuestos hormonales que se incluyeron en 2011
- El Ministerio insiste en que no hay vacío terapéutico porque hay alternativas
A partir del próximo 1 de agosto, el Gobierno dejará de financiar ocho píldoras anticonceptivas de última generación que se incorporaron al paraguas de la financiación pública en 2011. Fuentes del Ministerio de Sanidad aseguran a ELMUNDO.es que no se trata de una decisión ideológica sino de una "optimización de recursos".
Según ha adelantado la Cadena Ser, los ocho anticonceptivos hormonales que pasarán a ser de pago íntegro para las usuarias son Dretine, Dretinelle, Drosure, Drosurelle, Drosiane, Drosianelle, Liofora y Yira (todas ellas contienen una combinación de hormonas a base de etinilestradiol y drospirenona).
Un portavoz de Sanidad asegura a ELMUNDO.es que esta desfinanciación no tiene nada que ver con la que se llevó a cabo en agosto de 2012 de acuerdo con el nuevo Real Decreto, y que dejó fuera del precio público "417 medicamentos que se consideraban no esenciales, y cuya desfinanciación no suponía un perjuicio para los pacientes".
En el caso de los anticonceptivos, argumenta Sanidad, han sido los propios laboratorios quienes han decidido salirse del sistema de precios fijados por Sanidad y que establecía tres euros como precio máximo para estas píldoras más modernas que otros combinados hormonales. Un portavoz de la compañía Bayer, una de las más potentes en anticoncepción (fabricante de Yira), no ha querido valorar la decisión de Sanidad y se ha limitado a asegurar que sus fármacos no variarán de precio con esta medida, "lo único que cambia es que el Sistema Nacional de Salud no asumirá una parte del precio, que asumirá íntegramente el usuario".
Sanidad insiste en que con esta decisión no se produce vacío terapéutico, porque hay otras píldoras que llevan años en el mercado. "Sólo se dejande financiar los más modernos, porque no han demostrado un beneficio extra", señala un portavoz del departamento de Ana Mato. "En cualquier caso volveríamos a la situación que había en 2010, no a los años 80", se defiende Sanidad. Las píldoras que seguirán bajo la financiación pública son las denominadas 'de segunda generación', a base de otras hormonas: etinilestradiol y levonogestrel. Los implantes subcutáneos que también incluyó el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, seguirán bajo la financiación del SNS.
La incorporación de nuevos anticonceptivos al paraguas público es una vieja reivindicación de los especialistas en anticoncepción, que llevan años reclamando al Gobierno que financie no sólo pastillas orales e implantes subcutáneos, sino otras formulaciones como los parches o el anillo vaginal.
En este sentido, Sanidad ha insistido en que no tiene intención por ahora de financiar estas presentaciones (cada vez más pulares entre las mujeres en edad fértil) porque "no han demostrado financiación extra".
La decisión del Ministerio se produce a los pocos meses de que las autoridades comunitarias iniciasen un proceso de revisión de las píldoras de última generación, por considerar que pueden aumentar el riesgo de accidentes vasculares (trombos) entre algunas usuarias.
Se calcula que en España alrededor de dos millones de mujeres toman algún tipo de píldora anticonceptiva; la mitad de ellas, de las retiradas de tercera generación.
Según ha adelantado la Cadena Ser, los ocho anticonceptivos hormonales que pasarán a ser de pago íntegro para las usuarias son Dretine, Dretinelle, Drosure, Drosurelle, Drosiane, Drosianelle, Liofora y Yira (todas ellas contienen una combinación de hormonas a base de etinilestradiol y drospirenona).
Un portavoz de Sanidad asegura a ELMUNDO.es que esta desfinanciación no tiene nada que ver con la que se llevó a cabo en agosto de 2012 de acuerdo con el nuevo Real Decreto, y que dejó fuera del precio público "417 medicamentos que se consideraban no esenciales, y cuya desfinanciación no suponía un perjuicio para los pacientes".
En el caso de los anticonceptivos, argumenta Sanidad, han sido los propios laboratorios quienes han decidido salirse del sistema de precios fijados por Sanidad y que establecía tres euros como precio máximo para estas píldoras más modernas que otros combinados hormonales. Un portavoz de la compañía Bayer, una de las más potentes en anticoncepción (fabricante de Yira), no ha querido valorar la decisión de Sanidad y se ha limitado a asegurar que sus fármacos no variarán de precio con esta medida, "lo único que cambia es que el Sistema Nacional de Salud no asumirá una parte del precio, que asumirá íntegramente el usuario".
Sanidad insiste en que con esta decisión no se produce vacío terapéutico, porque hay otras píldoras que llevan años en el mercado. "Sólo se dejande financiar los más modernos, porque no han demostrado un beneficio extra", señala un portavoz del departamento de Ana Mato. "En cualquier caso volveríamos a la situación que había en 2010, no a los años 80", se defiende Sanidad. Las píldoras que seguirán bajo la financiación pública son las denominadas 'de segunda generación', a base de otras hormonas: etinilestradiol y levonogestrel. Los implantes subcutáneos que también incluyó el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, seguirán bajo la financiación del SNS.
La incorporación de nuevos anticonceptivos al paraguas público es una vieja reivindicación de los especialistas en anticoncepción, que llevan años reclamando al Gobierno que financie no sólo pastillas orales e implantes subcutáneos, sino otras formulaciones como los parches o el anillo vaginal.
En este sentido, Sanidad ha insistido en que no tiene intención por ahora de financiar estas presentaciones (cada vez más pulares entre las mujeres en edad fértil) porque "no han demostrado financiación extra".
La decisión del Ministerio se produce a los pocos meses de que las autoridades comunitarias iniciasen un proceso de revisión de las píldoras de última generación, por considerar que pueden aumentar el riesgo de accidentes vasculares (trombos) entre algunas usuarias.
Se calcula que en España alrededor de dos millones de mujeres toman algún tipo de píldora anticonceptiva; la mitad de ellas, de las retiradas de tercera generación.
.png)
No hay comentarios:
Publicar un comentario