Voluntades anticipadas diseñadas a medida de cada paciente

Los modelos estándar de los documentos de voluntades anticipadas pueden ampliarse con otras posibilidades que, aunque en principio no se contemplen, resultan importantes para los afectados.

Enrique Mezquita. Valencia | 13/06/2012 00:00

En este contexto, los notarios pueden jugar un papel como asesores o garantes, según explicó a Diario Médico Delfín Martínez, vicedecano del Colegio Notarial de Valencia, ponente en la I Jornada de Cuidados y Cuidadores en el Cáncer, celebrada en Almoradí (Valencia).

Martínez indicó que las voluntades anticipadas pueden ser muy variadas y presentar factores no previstos como "la declaración de una mujer embarazada que, en la hipótesis de un problema oncológico, no desea que le apliquen ningún tipo de terapia hasta que el feto nazca".

Persona de confianza

Según el notario, "existen múltiples circunstancias que pueden ser importantes para el paciente y, por ello, es preciso reflejarlas muy bien", destacando que "el documento debe realizar y perfilarse en contacto con la persona y, como mínimo, tras dos o tres entrevistas".

En su opinión, el representante no sólo es el interlocutor de los pacientes incapaces, sino que es posible que el enfermo "no quiera ejercer personalmente los derechos de información al paciente o a una segunda opinión", un caso muy frecuente en pacientes con cáncer, "que prefieren que sea su persona de confianza quien absorba toda la información y se la dosifique poco a poco". También apuntó que "debería crearse un sistema para que los notarios puedan inscribir y modificar electrónicamente las voluntades anticipadas".