Hay que utilizar la crisis para redefinir prioridades

La situación económica debe ser una oportunidad para aclarar qué proyectos e infraestructuras son necesarios y cuáles resultan prescindibles.

Enrique Mezquita. Valencia | dmredaccion@diariomedico.com | 17/06/2013 00:00

España ha vivido unos años de bonanza y apuesta económica por la investigación biomédica, pero en ocasiones este apoyo ha estado ligado más a criterios políticos o territoriales que meramente científicos.

Según Antonio Vidal-Puig, catedrático en Nutrición Molecular y Metabolismo en la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y director de Laboratorios de Investigación Metabólica del Addenbrooke's Hospital, también en Cambridge, la crisis económica actual debe verse como una oportunidad para redefinir el futuro de la investigación biomédica, que pasa por focalizar la inversión en la calidad y la excelencia y, sobre todo, en su evaluación a través de criterios únicamente científicos o innovadores.

Vidal-Puig, que impartió la semana pasada una conferencia en un acto organizado por el VLC Campus y el Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital Clínico de Valencia (Incliva), explicó a Diario Médico que "hasta hace 4 ó 5 años se vivió un aumento progresivo de dinero para hacer investigación", y que este enfoque "ha permitido hacer muchas cosas: unas son muy buenas y otras menos buenas".

Entre las cosas positivas, apuntó que "se ha apostado más por la calidad, creando una serie de centros de alto nivel que están respondiendo y primando su excelencia; pero al mismo tiempo, ha habido una financiación global de la que se han beneficiado muchos grupos y en la que se han tenido en cuenta cuestiones o criterios regionales o autonómicos", algo que ha provocado que "en ocasiones, se haya dirigido dinero hacia proyectos que no tenían calidad suficiente para ser financiados, pero sí aspectos políticos detrás".

Calidad discutible
En su opinión, en este escenario también se ha padecido que se invirtiera en grupos o investigadores cuya calidad "no había crecido proporcionalmente" a la inversión realizada. El momento actual de importante crisis económica es, según Vidal-Puig, "una situación difícil pero también una oportunidad". A juicio del experto, "lo importante ahora es centrar los recursos en lo que es de mejor de calidad para conseguir que sobrevivan el tiempo suficiente y, cuando cambie el ciclo económico, puedan coger nuevo ímpetu y salir adelante", ahondando en que "si esos aspectos desaparecen, volverlos a crear de cero es mucho más costoso".

Asimismo apuntó que "hay que focalizar la inversión teniendo como prioridad la excelencia y la calidad y sin ningún problema en relación a la distribución igualitaria entre comunidades autónomas". Este enfoque choca con la visión de que "había que tener de todo en todas partes".

Pero la realidad es que "si alguien tiene que trabajar en un tema determinado porque es su pasión de vida y debe irse a Bilbao o Sevilla, por ejemplo, tendrá que ir; lo que no puede esperar es que en todas las ciudades vaya a encontrar algo a la medida". Vidal-Puig dijo que "triplicaciones del mismo tipo de inversiones en tres comunidades por motivos políticos, por ejemplo, no tienen ningún sentido".

El hecho de que los investigadores y grupos tengan que prepararse para ser más competitivos y optar a un fondo único plantea un aspecto primordial: la evaluación de los proyectos y de las instituciones. "En esta situación, es difícil hacer un cambio desde dentro de un instituto, por ejemplo, porque la manera en que se selecciona internamente lo que cada uno considera que tiene valor o no genera muchas tensiones internas que impiden que ese grupo siga trabajando", señala.

Generosidad

Además, "si hubiera una cultura nacional que permitiera ser suficientemente objetivo y generoso para seleccionar lo que más conviene al país, sería lo ideal... pero eso requiere un cierto grado de experiencia y entrenamiento ". Por tanto, la conclusión final es que esa evaluación "requiere un input externo", ya que es la forma de hacer una criba "sin vinculaciones emocionales o personales".

En palabras de Vidal-Puig, "es necesario plantear una evaluación externa de los recursos disponibles y su potencial, probablemente a nivel internacional, que defina la calidad y, en función de las recomendaciones, que las autonomías inviertan sus recursos en hacer competitivos sus aplicaciones".

En este sentido, una opción viable sería una aproximación mixta, con expertos internacionales y nacionales, ya que éstos podrían completar los aspectos que los primeros desconocen al tiempo que podrían adquirir la experiencia para hacer este tipo de evaluaciones.

Un encuentro sobre Excelencia en Biomedicina para aclarar el futuro de esta materia

Obesidad
El endocrinólogo valenciano Antonio Vidal-Puig ha centrado su carrera en el estudio de cómo el exceso de grasa corporal resulta tóxico para la salud. Su investigación profundiza en los mecanismos moleculares de la resistencia a la insulina inducida por lípidos.
Investigación
La jornada organizada por el Incliva concluyó con un taller de investigación en que participaron científicos e investigadores biomédicos del ámbito sanitario de experiencia internacional. Entre ellos, el gerente del Área de Salud del Clínico, Luis Martí, el director general de Incliva, Rafael Carmena y el director científico, Josep Redón.