INVESTIGACIÓN | El Gobierno ha inyectado sólo 25 millones de los 100 que necesita
El CSIC sufrirá un 'cataclismo' si no recibe otros 75 millones antes de octubre
Emilio Lora-Tamayo, presidente del CSIC, durante una entrevista.| Carlos Miralles.- Necesitan una inyección total de 100 millones en 2013 para seguir funcionando
- El presidente, Emilio Lora-Tamayo, dice que el Gobierno le transmitió su intención de "no dejar caer" al mayor organismo investigador de España
Si el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) no recibe una inyección presupuestaria de 75 millones de euros antes de octubre, el mayor organismo de investigación de España dejará de funcionar. Así de rotundo se ha mostrado esa mañana su presidente, Emilio Lora-Tamayo, durante un encuentro con periodistas a los que ha convocado para, "desgraciadamente", explicar la grave situación económica que atraviesa el CSIC, que según ha definido, "es mucho peor que delicada".
El déficit del CSIC en 2013 asciende a 102 millones de euros. Hace unos días, el 28 de junio, el Gobierno aprobó una inyección presupuestaria de 25 millones de euros a través de un Real Decreto-Ley por el que se le concedió un suplemento de crédito por ese importe. Según explicó Lora-Tamayo, doctor en Físicas, el Gobierno se ha comprometido a realizar una segunda aportación en septiembre. Si no llegan esos 75 millones más que necesitan, advierte, habrá "un cataclismo" y la maquinaria del CSIC, que aglutina a más de 100 centros de I+D y tiene una plantilla de 15.000 trabajadores, dejará de funcionar: "Sin ese dinero no llego a fin de año. Se acaba la gasolina", comparó.
Según aseguró, el ministro de Economía, Luis de Guindos, le ha transmitido "que no van a dejar caer el Consejo". "No tengo que dudar de que esto sea así", añadió Lora-Tamayo. El Gobierno se habría comprometido a aportar a lo largo de 2013 "un mínimo de 75 millones de euros", aunque esta cantidad es insuficiente para mantener el Consejo pues, según asegura tajante su presidente, necesitan 100. "Hemos recibido 25 millones. Agradecemos el esfuerzo porque sabemos que no es fácil. Con esta cantidad de dinero podemos llegar a septiembre o octubre, pero necesitamos imperiosamente que en septiembre lleguen otros 75 millones".
180 millones anuales menos que en 2008
Mientras no reciban la ansiada segunda transferencia ministerial, el presidente aplica lo que denomina "un compromiso de prudencia". "Hasta que no lleguen esos 75 millones se priorizan los gastos", aunque asegura que "hasta ahora no ha faltado un duro para ejecutar proyectos". Lora-Tamayo, que desde enero de 2012 preside el CSIC, un cargo que ya ocupó entre 2003 y 2004, ha subrayado que el actual equipo directivo "no ha generado el déficit que sufre el Consejo".
"La bajada de ingresos en los últimos años se ha unido a la disminución de transferencias del ministerio", resumió. Así, en 2013 las transferencias ministeriales ascendieron a 409 millones de euros, 180 millones menos que en 2008, cuando esta partida alcanzó los 589 millones de euros. El CSIC cerró aquel año con un superávit de 26 millones de euros, según las cuentas facilitadas por su presidente, que ha que comparecido junto a Antonio Figueras, vicepresidente de investigación del CSIC.
En total, ha cifrado Lora-Tamayo, desde 2008 han recibido unos 500 millones de euros menos. "La situación empezaba a ser angustiosa en 2012", ha explicado. Y es que el pasado verano el CSIC paralizó temporalmente los pagos a proveedores para poder hacer frente al pago de las nónimas.
Los ahorros de los centros, a la caja común
Lora-Tamayo también ha defendido la polémica decisión del CSIC de utilizar los remanentes de los centros de investigación que forman parte de este organismo, es decir, sus ahorros, como "colchón" para garantizar la viabilidad económica de la institución hasta que reciban la transferencia ministerial tras el verano.
Alberto Sereno, secretario general del CSIC, envió el pasado 2 de julio una carta a los directores de todos sus centros investigadores informándoles de que una parte de los remanentes ahorrados por cada centro antes de enero de 2012 se utilizarían para sufragar las necesidades económicas del CSIC, según adelantó Materia. Pocos días antes, a finales de junio, Lora-Tamayo había celebrado la Reunión de Directores 2013 con los dirigentes de los centros de I+D que forman parte del CSIC.
"Nuestra intención es que los remanentes sean una situación temporal", ha dicho Lora-Tamayo durante la rueda de prensa de este martes. "Una vez que se logre estabilizar el Consejo, algo que no se va a lograr de la noche a la mañana, y se empiecen a recuperar lo ingresos, iremos reintegrando los remanentes de una manera controlada y ordenada".
Para ello, aseguró que "se está pidiendo información a los centros para regenerar los remanentes". De esta forma, Lora-Tamayo salía al paso de las críticas de los investigadores, molestos por esta resolución que coloca al mismo nivel a todos los centros con la independencia de la gestión que hayan realizado de sus ingresos, y que ven como ya no disponen de un dinero que habían ahorrado.
El presidente también se mostró satisfecho con el ahorro que han logrado "gracias al esfuerzo de todos" y a las medidas implantadas para reducir gastos, entre las que se encuentra el cierre total de una veintena de centros durante dos semanas en agosto, un cierre parcial de otros centros o la reducción de gastos en luz, seguridad y nóminas: "El plan de ahorro está en marcha y está dando resultados". Según detalló, el año pasado ahorraron 60 millones de euros respecto a 2011 y en lo que va de 2013, 36 millones.
Lora-Tamayo mostró también su deseo de mantener la plantilla y mostró su preocupación por la pérdida de la mayoría de las plazas que ocupan los investigadores que se están jubilando: "Yo no quiero perder recursos humanos. Es el mejor valor que tenemos", aseguró.
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