La crisis ya afecta de forma seria la actividad investigadora de las empresas españolas

Madrid (12/7/13) - Silvia C. Carpallo

Según datos de 2011 del último Informe Cotec, el número de empresas con actividades innovadoras se redujo en un 43 por ciento, mientras que las empresas con actividades en I+D, se redujo en un 36 por ciento. Los expertos consultados por Cotec auguran igualmente que estas cifras van a seguir deteriorándose en los próximos años.

"Este año por primera vez caen todos los indicadores de I+D es España", esa es la conclusión que Juan Mulet, director general de Cotec extraía del Informe Cotec 2013. Y no es la única mala noticia, puesto que una de las novedades del informe es que se ha contado con la opinión de 150 expertos, los cuales, en su mayoría, auguran que la situación de hecho no sólo no va a mejorar, sino que va a seguir en descenso en los próximos años.
Los recortes han afectado a la I+D tanto tanto en el sector público como en el privado, y sólo basta mirar los Presupuestos Generales del Estado. En 2013, el presupuesto en I+D suponía un total de 5.926 millones de euros, un 7,2 por ciento menos que el pasado año, en el cuál, ya se había reducido la capacidad del sector en un 26 por ciento, según apunta el Informe. No se trata de un recorte igualitario, la partida de créditos se ha reducido en un 2,5 por ciento, mientras que otras llegan al 13,9 por ciento.
Pero la verdadera novedad es que este año también cae la empresa privada. Si bien anteriormente, pese a no haber hecho nuevas inversiones, sí se mantenía el gasto corriente, este cae por primera vez en un 1,5 por ciento. Este Informe, que trabaja con datos de 2011, estima además que el número de empresas con actividades innovadoras se redujo en un 43 por ciento, mientras que las empresas con actividades en I+D, se redujo en un 36 por ciento. Lo más sorprendente, según Mulet, es que "no ha habido ninguna reacción social al respecto".
No son las únicas cifras de descenso. En cuanto a los investigadores públicos españoles, también se produce una caída de un 6,1 por ciento de los pertenecientes a la Administración, y de un 3,7 de los vinculados con la enseñanza superior. También cae la solicitud de patentes internacionales de origen español, que habían crecido de forma prácticamente continua en esta última década. "Nuestros empresarios no son sensibles a las patentes, salvo en sectores como la Farmacia".
Precisamente el sector farmacéutico se mantenía como el tercer sector más innovador en España, y es que en palabras de Juan Mulet, "este sector tiene como desventaja que si no hace investigación se hunde, por lo tanto tendrá que seguir invirtiendo, la pregunta es dónde".
Haciendo comparación
En datos desglosados por CC.AA, el patrón de contribución al gasto de I+D es similar al de otros años, encabezado por Madrid con un 26,5 por ciento, Cataluña con un 21,9 por ciento, País Vasco con un 9,9 por ciento, Andalucía con un 11,6 y Valencia con un 7,6.
También existen datos comparativos respecto a Europa. Si bien España comenzó a crecer en los últimos años, este ascenso quedó totalmente paralizado con la crisis, y actualmente se ha convertido en un decrecimiento. Sin embargo, los países del entorno, aunque lentamente, avanzan en su recuperación, dejando a España en una pérdida de posiciones en cuanto a investigación internacional.
Mulet proponía, entre otras medidas para frenar esta caída, la incentivación de la compra pública de tecnología innovadora, "que no está funcionando como nos gustaría". Por otra parte, los expertos consultados señalaban a la escasa dedicación de recursos financieros y humanos para la innovación de empresas, y a la falta de cultura y de demanda nacional como principales problemas.