El 'BOE' eleva de 2,64 a 4,13 euros el copago en fármacos para crónicos

El BOE del pasado sábado publicó una actualización del copago máximo que desembolsarán los pacientes crónicos por los medicamentos y productos sanitarios que gozan de la consideración especial de aportación reducida.

LAURA G. IBAÑES | 12/06/2012 00:00

Hasta ahora ese copago estaba fijado en el 10 por ciento del precio del medicamento hasta un máximo de 2,64 euros por envase. La actualización publicada por Sanidad incrementa el IPC acumulado de los últimos 16 años para elevar esta cantidad máxima hasta 4,13 euros por envase.

La decisión adoptada por Sanidad no es baladí. Actualmente se están dispensando algo más de 4.800 presentaciones de medicamentos de esta clase, de los llamados fármacos con cícero o punto negro que tienen aportación reducida para los pacientes, aun cuando en el Nomenclator oficial figuran incluso más. Esto significa que aproximadamente el 35 por ciento del total de envases de medicamentos dispensados por las boticas corresponden a medicamentos de aportación reducida por los que el paciente tendrá que desembolsar en adelante un 56 por ciento más que antes.

Las sociedades científicas advierten a Sanidad de que los nuevos copagos en dietoterápicos pueden incrementar el reingreso hospitalario

Con todo, estos fármacos son consumidos tanto por población activa como por pensionistas, por lo que no es sencillo calcular el impacto real que tendrá esta medida en cuanto a ahorro para el SNS, puesto que para los pensionistas se mantendrá la cuantía de copago máximo mensual y para los activos no. Sanidad ha incluido una disposición en el BOE para que esta cuantía sea el límite máximo a pagar por los pacientes que padecen sida. Aunque en la disposición de Sanidad no se aclara cómo se articulará esta medida para poder aplicar el tope de copago a todos los medicamentos que consuman los pacientes con sida, con independencia de si cuentan con cícero o no, esta opción se está utilizando ya en algunos colectivos mediante visados, como en el caso de los fármacos para los pacientes con hipercolesterolemia familiar.

En cualquier caso, Sanidad estudia junto a las autonomías sustituir las actuales recetas de colores rojo y verde (que en el borrador inicial del decreto de reformas incluso se multiplicaban en malvas, amarillas, azules, etc.) por una única receta que lleve un código de barras que determinará el porcentaje de copago a pagar por el paciente, por lo que la aportación reducida en cualquier fármaco (con cícero o sin él) para colectivos concretos como pacientes con sida podría conocerse de forma automática a través de ese código de barras.

Finalmente, Sanidad baraja la idea de establecer silencio positivo para acelerar la concesión de la devolución de las cantidades extra que hayan pagado los pensionistas por encima de su copago máximo mensual.

Nutrición
Por otra parte, la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral, la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética y la Asociación Española de Pediatría han remitido al Ministerio de Sanidad un escrito mostrando su preocupación por el nuevo copago que se aplicará a los productos dietoterápicos, para los que no se conoce todavía el importe máximo mensual. Las sociedades científicas alertan de que las limitaciones económicas a la obtención del soporte nutricional pueden agravar las patologías de base, disminuir el efecto de los tratamientos y aumentar los reingresos.