Cataluña cede y aplicará el copago farmacéutico a partir del domingo

El portavoz del Gobierno rectifica al consejero de Salud, que había dado por hecho que por ahora no se aplicaría el decreto del Ejecutivo central

Miquel Noguer Barcelona 26 JUN 2012 - 15:21 CET

Cataluña aplicará a partir del domingo el copago sanitario decretado por el Gobierno central pese a que inicialmente lo había puesto en duda. El portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, ha asegurado este martes que la Generalitat cumplirá el copago sanitario, aunque busca fórmulas para evitar que los pensionistas o las personas con menos recursos tengan que avanzar dinero tras haber alcanzado su tope legal de copago.

Esta mañana, en una entrevista radiofónica, el consejero de Salud, Boi Ruiz, ha dado por hecho que Cataluña no aplicará este próximo domingo el copago sanitario decretado por el Ministerio de Sanidad, porque el sistema aún no está preparado y ha abogado por implantarlo en el mes de agosto.

Homs, tras la reunión semanal del Gobierno catalán ha dado una versión completamente distinta. Ha asegurado que la Generalitat "no tiene más remedio" que aplicar como prevé el Gobierno central el copago de medicamentos dispensados con receta en las farmacia en función de la renta de los usuarios.

La Generalitat quiere evitar aparecer como una comunidad díscola en todo lo referente a medidas de ahorro porque, según Homs, el Gobierno está vigilado "con lupa" por las autoridades comunitarias. Pese a que cada vez se ve con mayor claridad que no se cumplirá el objetivo de déficit previsto, la Generalitat no quiere desmarcarse del discurso de la austeridad.

Con todo, Homs ha asegurado que el Gobierno ha vehiculado mal todo el proceso de copago farmacéutico. "No entendemos cómo se pueden hacer las cosas tan mal, peor no se pueden hacer", ha denunciado Homs, quien ha alegado que la aplicación de esta medida se hace "muy difícil" porque apenas hay tiempo para configurar el sistema informático que debe permitir implementarla.

La Generalitat teme que a partir del domingo se reproduzcan los problemas que ya han habido esta semana con la implantación de la tasa de un euro por cada receta médica en las farmacias catalanas. El sistema informático ha sufrido aparatosos fallos y los farmacéuticos se han rebelado contra esta tasa impuesta por el Gobierno catalán.