Las estadísticas, otro eje polémico
Distintas instituciones cuestionan la falta de cifras confiables para cuantificar embarazos interrumpidos
Si la despenalización del aborto en casos de violación genera controversia, igual polémica rodean a las estadísticas utilizadas en nuestro país para graficar esas prácticas y sopesar argumentos en favor o en contra.
El Ministerio de Salud de la Nación (MSN) carece de información estadística actualizada sobre la cantidad de abortos practicados en la Argentina, sean punibles o no punibles, según confiaron ayer voceros de esa cartera a LA NACION.Tampoco hay una estimación "reciente y confiable" de la Organización Mundial de la Salud en la materia. Sus antiguos guarismos hablan de 500.000 embarazos interrumpidos por año, lo que equivale a afirmar que hay más de 40 abortos por cada 100 nacidos vivos. La cifra se proyecta "exigua o exagerada", según qué grupo la analice.
Pero es la clandestinidad misma del aborto provocado lo que impide conocer con precisión su magnitud. Otros estudios basados en análisis estadísticos y encuestas obtenidos en maternidades y publicados por el Ministerio de Salud y Acción Social establecen cifras más variables que oscilan entre los 300.000 y 400.000 interrupciones de embarazos al año.
Además, el aborto clandestino, practicado en condiciones precarias en nuestro país, rezan las mismas estadísticas, se ubica como la primera causa de muerte materna.
Quizá, la clave estadística para un tema tan capital de salud pública la tenga el juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni, quien afirmó que las cifras sobre esas prácticas aquí son alarmantes: "De cada cinco nacimientos hay un aborto".
Según estadísticas oficiales del MSN, en 2010 hubo un total de 756.176 nacidos vivos en el país, lo que ubicaría la cifra total de abortos clandestinos en un poco más de 150.000 al año. Cuántos de ellos son producto de abusos sexuales es otro de los datos inciertos.
Por año, unas 80.000 argentinas terminan hospitalizadas a causa de prácticas abortivas inducidas, incompletas y precarias, pero también espontáneas. Otra vez, la porción exacta aparece desdibujada.
En un detallado estudio sobre la materia, publicado en la Revista Iberoamericana para la Ciencia , Fernando Savarí, profesor de Física Biológica de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Cuyo, cuestionó que el aborto sea la principal causa de muerte materna en el país.
"El aborto causa en el país -dijo-sólo un tercio de las muertes maternas. Más del 50 por ciento se debe a otras causas obstétricas directas [causadas por el embarazo] y la mayor parte del resto, a causas obstétricas indirectas, como enfermedades agravadas por el embarazo. En 2004 fallecieron 6725 argentinas de 15 a 44 años. El aborto complicado fue la causa en 94 casos [el 1,4%]. Los tumores, las enfermedades cardiovasculares, respiratorias, infecciosas y los accidentes fueron responsables de casi el 80% del total de decesos", polemizó.
Pero la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Buenos Aires es categórica respecto a la incidencia de los abortos clandestinos como primera causa de muerte y se suma a la polémica: "Se estima que entre el 35 y el 45% de las muertes maternas en nuestro país se deben a complicaciones del aborto inducido. Ello explica la alta tasa de mortalidad materna aquí, que alcanza el 50 por 100.000 nacidos vivos, lo que no se corresponde con el nivel de alfabetización, atención médica y nivel socioeconómico".
antecedentes
- EN ENTRE RÍOS
Enero de 2011
El caso de una niña de 11 años, que quedó embarazada luego de ser abusada por un vecino reabrió el debate sobre abortos no punibles luego de que la familia pidiera autorización judicial para una práctica que luego no se realizó.
- EN RÍO NEGRO
5 de abril de 2010
La justicia de Río Negro autorizó a una menor de 17 años, con 12 semanas de embarazo producto de una presunta violación por parte de su padre, a interrumpir el embarazo. El juez consideró que no era necesario el pedido de autorización judicial.
- EN MAR DEL PLATA
15 de junio de 2010
La justicia marplatense permitió la interrupción de una gestación luego de que los médicos afirmaron que el embarazo era extrauterino y "que el bebe no tenía posibilidades de sobrevida".
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