La I+D biomédica juega un papel estratégico para la economía

Barcelona (27/03/2014) - Redacción

• Por su efecto arrastre y su aportación para mejorar la competitividad del país

• Se ha puesto de manifiesto en la Jornada de Innovación en el Sector Sanitario, organizada el IDIS, en colaboración con Farmaindustria, Asebio y Fenin

Barcelona ha acogidola celebración de la Jornada de Innovación en el Sector Sanitario, organizada el Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (IDIS), en colaboración con Farmaindustria, Asebio y Fenin, en la que se ha presentado el Informe Anual de Investigación Clínica en Centros Privados. En la inauguración de la misma el director general de Farmaindustria, Humberto Arnés, puso de manifiesto el papel estratégico de la I+D biomédica en la economía del país, por su efecto arrastre sobre otros sectores y su aportación imprescindible en la mejora de la competitividad del país.

Con el fin de reforzar esta contribución, Farmaindustria lanzó hace ocho años el Proyecto BEST de excelencia en Investigación Clínica de Medicamentos en España, cuyo objetivo es fomentar la inversión en I+D mediante la objetivación y monitorización de los procesos de investigación clínica que se realizan en nuestro país, al tiempo que permite identificar las diferentes prácticas y tomar medidas consecuentes que permitan mejorar su eficiencia y competitividad en el terreno.

Actualmente, el Proyecto BEST está integrado por 43 compañías farmacéuticas líderes en I+D, 57 centros sanitarios (públicos y privados), 14 centros directivos de las consejerías de sanidad de las comunidades autónomas y 4 grupos de investigación clínica independiente. Su objetivo final es identificar los factores de éxito que conducen a una investigación clínica más eficiente y compararlos a escala nacional e internacional.

Según datos BDMetrics del proyecto BEST, más de 85.000 pacientes y más de 700 centros sanitarios han participado en los últimos nueve años en ensayos clínicos en España. Además el número de ensayos clínicos con participación de algún centro privado se acerca ya al 40 por ciento, habiéndose incrementado la participación de los centros privados en las fases más tempranas de la investigación (especialmente Fases I y II), en concreto en el área de Oncología. Igualmente, ha aumentado esta participación en ensayos clínicos pediátricos y en medicamentos huérfanos.