la rotación del mir es de 2 meses
Endocrinología pediátrica pide su desarrollo docente
La Sociedad de Endocrinología Pediátrica denuncia el déficit docente de MIR y especialistas en esta área de conocimiento y pide que se aproveche el desarrollo de las ACE para potenciar esta formación específica.
Santiago Rego. Santander | 14/05/2012 00:00
Juan Pedro López Siguero, Cristina Luzuriaga y Luis Castaño González, en Santander. (Roberto Ruiz)
El ya expresidente lamenta que las subespecialidades pediátricas, entre ellas las de Endocrinología, no se hayan desarrollado a través de esas ACE, ya que "son áreas que pueden incluso funcionar como especialidades de hecho, aunque formalmente no sean consideradas como tales. Lo que sí se conseguiría es una mejor capacitación en algunas áreas clínicas sin renunciar a nuestra condición de pediatras".
- La sociedad científica aboga por conseguir una mejor capacitación en su área sin que los especialistas tengan que renunciar a su condición de pediatras
Según López Siguero, el proyecto de troncalidad -al menos lo que se conoce de él- busca médicos "que puedan servir para todo, al entender que es más práctico y barato. El borrador plantea que haya dos años de rotación general por Medicina Interna y, posteriormente, dos más de especialidad. Se buscan internistas, que es lo más práctico", dice López Siguero, aunque matiza que habrá que esperar a la definitiva configuración del decreto, que aún no se conoce.
Como su predecesor en el cargo, Castaño González insiste en que "sin dejar de ser pediatras, hay que apostar por que en los centros de referencia haya profesionales especializados de manera particular en la patología endocrina, y un pediatra general no está capacitado ante problemas endocrinológicos complicados".
Según Cristina Luzuriaga, presidenta del comité organizador del congreso y adjunta del Servicio de Pediatrá del Hospital de Valdecilla, "haría falta articular y desarrollar mejor la formación en esta área pediátrica a fin de que los pacientes reciban la mejor atención. Nuestro reto es que el médico joven que opta por incorporarse a la Endocrinología pediátrica tenga una formación adecuada". Los tres han coincidido en que esos dos meses de rotación son claramente insuficientes.
"Nos sentimos pediatras y, de hecho, la formación básica que tenemos es la pediátrica, pero a renglón seguido somos endocrinólogos. El conocimiento científico es tan amplio que se necesitan especialistas en áreas de conocimiento cada vez más específicas para llegar a un mejor diagnóstico y tratamiento en los niños con problemas endocrinológicos", concluye el nuevo presidente de la sociedad científica.
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